25 octubre 2007

Con papá

Por más que lo intento no logro evitar la permanencia de ese leve rastro de ceniza en la esquina del mueble del comedor. Mi mujer lleva años pidiéndonos a mí y a mi madre que lo dejemos porque nos hace daño, pero la costumbre es más fuerte que la razón y ninguno de los dos podemos prescindir de ese ritual en cada comida. Lo hemos intentado varias veces, pero antes del segundo plato nos arrepentimos y repetimos la ceremonia. Mi mujer dice que sólo es un desagradable montoncito de ceniza sobre el mueble, pero ella no entiende que no podamos comer sin papá.

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